Lascas

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Te imagino, Poeta, trepado en tus lascas, volando como lo hacía el heroico Sun Wu-Kung, al cabalgar la nube maravillosa con la que dejaba atrás miles de li en unos instantes. Te imagino por los cielos, trasponiendo distancias, siglos y posibilidades. Te imagino en un cenáculo de poesía semejante al del monje San-Tsang -también llamado Tang y Tripitaka- en el Santuario de los Inmortales del Bosque, en su viaje del País del Centro del Mundo hacia el Oeste en busca de los textos sagrados de Buda. Tang fue arrebatado mágicamente del camino por un viento que lo condujo a un convite de poetas, y se inició la ronda. Los poetas resultaron ser, a fin de cuentas, los espíritus de un pino, un ciprés, un bambú, un enebro y un albaricoquero. El intercambio de poemas fue memorable.
¿Quiénes serían tus dialogantes en este viaje? Son muchos los pares que señalas en tu libro. Reproduzco parte de tu larga lista: Hesíodo, Juvenal, Cervantes (obviamente), (y otro obvio) Guillermo de Poitiers, Darío, Lucrecio, Garcilaso, Víctor Hugo, Li Bo (el inmortal poeta de la Luna), Juan de Jáuregui (quien siendo -además- pintor, pintó a Cervantes), Wang Wei (quien siendo -además- pintor, pintó aguas y montañas), Hans Christian Andersen, Inger Christensen (tu querida amiga, a quien dedicas un capítulo del libro), Zhuang Zi (el taoísta), Jean de Lescurel (colgado por crímenes contra mujeres), y junto a él Francois Villon (quien un siglo después escribió la Balada de los Ahorcados mientras esperaba, preso, ser conducido a la horca); en contraste con los infames, los poetas heroicos: Francisco de Aldana (caído en combate en las tierras marroquíes de Alcazarquivir), Miguel Hernández (muerto en prisión bajo el franquismo) e Ibn al-Albabar (el andalusí descendiente de fabricantes de agujas -o de lascas-, alanceado por escribir “En Túnez reina un tirano a quien neciamente dicen califa”)… ¿Quién?
Alfredo López Austin

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Óscar Oliva

Sobre Óscar Oliva

Óscar Oliva  nació en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, en 1937. Su obra primera se encuentra reunida en “La voz desbocada” dentro de La Espiga Amotinada (libro colectivo, FCE, 1960), y en “Áspera Cicatriz” de Ocupación de la palabra (libro colectivo, FCE, 1965). En 1971 le fue concedido el Premio Nacional de Poesía Aguascalientes por su libro Estado de sitio, publicado por Joaquín Mortiz al año siguiente y en una segunda edición en Lecturas Mexicanas (SEP, 1986). En 1985 la Editorial Katún editó su poesía reunida bajo el título Trabajo Ilegal. Poesía 1960-1984, de la que existe una segunda edición publicada por Papeles Privados con dibujos de Jesús Martínez. Editados por la UNAM aparecieron, en 1988, La realidad cruzada de rayos(Colección Material de Lectura), y en 1989 Óscar Oliva. Voz viva de México. En 1999 publicó la antología bilingüe Écouter Le Monde/Escuchar al mundo bajo los sellos Écrites des forges, UNAM y Aldus, que publicó además en 2003 Lienzos transparentes y en el 2010 Estratos, en coedición con el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes. Su poesía ha sido llevada a escena por el director teatral Germán Castillo y por la coreógrafa Celia Lugo . En 1990 se hizo acredor al Premio Chiapas Rosario Castellanos. En 2012 el Congreso del estado de Chiapas lo distinguió con la Medalla Rosario Castellanos, y en 2013, por auspicio de la Universidad Autónoma de Zacatecas, fue homenajeado en el Festival Internacional de Poesía Ramón López Velarde, en donde se le galardonó con la medalla Ramón López Velarde y el Premio Internacional de Poesía . En 2015, Aldus, CONACULTA, CONECULTA, UNACH, y UNICACH, editaron Iniciamiento, poesía reunida, 1960-2014, en dos volúmenes. Radio UNICACH realizó en 2016 la serie radiofónica Iniciamiento, y en 2017, artistas nacionales e internacionales festejaron sus 80 años de edad, con diversas actividades artísticas.